El pasado miércoles, el Senado -con apoyo de parte de la bancada colorada cartista que responde al presidente Peña y al expresidente Horacio Cartes- rechazó el proyecto de ley que planteaba derogar el convenio con la Unión Europea, que es resistido por sectores sociales conservadores y religiosos que alegan que la colaboración financiera de la Unión Europea con Paraguay va condicionada a la introducción del vagamente definido concepto de “ideología de género” en la educación paraguaya.

El rechazo llegó luego de un cambio de postura del presidente Peña sobre el tema. Durante su campaña electoral, el mandatario apeló a los votantes conservadores haciendo de la derogación del convenio una de sus principales promesas electorales, pero luego de asumir la Presidencia pasó a apoyar que se mantenga el acuerdo.

“El mandante es el pueblo”

Centurión dijo que los líderes de la Iglesia en Paraguay deben ahora, como “voz profética”, generar el debate sobre el tema y recordar a los gobernantes que “el mandante es el pueblo”.

Consultado sobre la posibilidad de que el Gobierno quiera aplacar a los religiosos y conservadores incorporando en el sistema educativo el cuestionado texto de corte conservador “12 ciencias para la educación de la sexualidad y la afectividad” -que ha sido recibido con críticas por parte de organizaciones civiles, familias y estudiantes–, el religioso opinó que sería “nefasto” que la Iglesia “venga a pactar”.