El presidente Peña destacó la crucial importancia de la hidrovía para Paraguay, ya que el 80 por ciento del comercio del país, tanto importaciones como exportaciones, se realiza a través de esta ruta. Aunque reconoció la potestad de cobrar un peaje, rechazó cualquier intento de establecerlo unilateralmente.

La tensión entre ambos países también se extiende al Tratado de Asunción. Según Peña, Argentina no está cumpliendo con lo acordado respecto a la libre circulación, lo que llevó a Paraguay a presentar una demanda ante el Tribunal del Mercosur. "El acuerdo del Mercosur representa un gran logro para nuestra región. Es lamentable que en estos momentos veamos cómo se erosiona este tratado", lamentó Peña.

Además, el presidente paraguayo mencionó otro punto de fricción con Argentina: la deuda pendiente relacionada con la Entidad Binacional Yacyretá. Argentina mantiene una deuda de 150 millones de dólares con Paraguay, fondos que son vitales para la administración de diversas entidades gubernamentales paraguayas. "La demora en estos pagos ha afectado la operación normal de la EBY y ha impedido la continuación de proyectos cruciales", señaló Peña.

En este contexto, el ministro de Economía, Carlos Fernández Valdovinos, comunicó que Paraguay no dará su visto bueno al Fondo Monetario Internacional para las revisiones del programa que Argentina sostiene con el organismo, a menos que se regularice la situación de los pagos atrasados.