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Fue en el discurso de evaluación de gestión

El presidente Cartes justificó el narcotráfico: dijo que es "una realidad cultural" del país

Horacio Cartes, presidente de Paraguay (Dibujo: NOVA).

Horacio Cartes, dijo en el Congreso, durante el discurso de evaluación de su gestión del último año, que el crimen organizado y el narcotráfico son ‘una realidad cultural’ en el país, con ‘décadas de arraigo’.

Aseguró que la presencia del narcotráfico y los grupos criminales organizados, especialmente en la zona norte del país, son consecuencia de “sesenta años de abandono”.

Afirmó además que desde que asumió la Presidencia, en 2013, se han “duplicado” las incautaciones de marihuana, tanto en el número de kilos de la hierba ya cosechada, como en cuanto a la cifra de hectáreas de plantaciones destruidas.

“No debemos enfocar las políticas en las sustancias, sino en las estructuras que hacen del narcotráfico un negocio. Duplicar la incautación de droga dimensiona un síntoma, pero no resuelve la raíz del problema. Apostamos a la inteligencia para desbaratar las estructuras criminales que hacen un negocio del narcotráfico”, expuso el Presidente de Paraguay.

Añadió que estas acciones han producido un perjuicio financiero al negocio del narcotráfico de más de 500 millones de dólares, y enfatizó que “los crímenes emblemáticos de figuras públicas ya no quedan impunes”.

La existencia de presuntos vínculos entre el tráfico de drogas y algunos políticos, conocida como “narcopolítica”, saltó a la luz pública a raíz del asesinato en octubre del año pasado del periodista Pablo Medina, que investigaba estas supuestas conexiones.

En este sentido, dijo que el Gobierno espera ‘en breve’ la extradición de Vilmar Acosta Marques, acusado de ser el autor intelectual del asesinato de Medina y de su asistente Antonia Almada, y actualmente detenido en Brasil.

Cartes también se refirió a los grupos armados que supuestamente acechan a ganaderos y grandes terratenientes en el norte del país, el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) y la Asociación Campesina Armada (ACA), y destacó que el 72% de los abatidos vinculados a esos grupos criminales se registraron durante su gestión.

En 2013, el Gobierno de Cartes creó las Fuerzas de Tarea Conjunta, un contingente de militares y policías destinado al combate de esos grupos, a los que el Estado responsabiliza de la muerte de 42 personas desde 2008.

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